“Una jovencita de 19 años inició hace cinco meses con síntomas de lupus. Empezó con una sensación de piquetitos en el tobillo y, al mes, esa sensación se le subió a la pierna. Hace 15 días perdió la visión por completo, así como el movimiento en todo el cuerpo. Como al principio sólo eran “piquetitos”, ella pensó que el zapato le apretaba. Bastaron sólo cinco días para que perdiera la vista”. Mireya Rodríguez Salas, especialista en Neurología, México.

El lupus es quizá una de las enfermedades más difíciles de afrontar, debido a las repercusiones que tiene en el organismo. Es un padecimiento del sistema inmunológico que va atacando a diferentes órganos de nuestro cuerpo, lo que ocasiona que se vaya deteriorando rápidamente.

El Lupus Eritematoso Sistémico, conocido simplemente como lupus, es una enfermedad del sistema inmunológico donde nuestras propias células de defensa se convierten en atacantes de nuestro organismo. Normalmente, el sistema inmunológico es el conjunto de mecanismos de defensa que nos protege de infecciones y agentes extraños. Lo que pasa con el lupus es que este sistema se encuentra alterado y ataca a los diferentes órganos de nuestro cuerpo. Es un padecimiento multisistémico debido a que afecta diferentes órganos, como la piel, el riñón, el pulmón, el corazón, el sistema nervioso y las articulaciones, entre otros. De hecho, puede alterar a todo el organismo. El lupus afecta a una de cada 2 mil personas. Es nueve veces más común en las mujeres que en los hombres(1).

Las mujeres en edad reproductiva, de 14 a 45 años, son las más afectadas, sin embargo, se puede presentar en niños o ancianos. La causa del lupus es desconocida, pero se piensa que se debe a una combinación de factores genéticos, ambientales y hormonales, que juntos pueden desencadenar el ataque del sistema inmune a los diferentes órganos. Se considera que las hormonas femeninas desempeñan un papel importante, porque las mujeres presentan el lupus con mayor frecuencia que en los hombres; además, la enfermedad se puede activar en forma importante durante el embarazo, una etapa en que las hormonas femeninas están muy elevadas(2).

De acuerdo con la doctora Mireya Rodríguez Salas, especialista en Neurología, del Hospital Ángeles México, el lupus eritematoso sistémico es el más agresivo, debido a que es una enfermedad que destruye la vida de las personas que lo padecen e, inevitablemente, ocasiona la muerte. Afecta su vida social, familiar y laboral. Son personas que por lo general ya no continúan sus estudios, ya no trabajan y tienen que depender del presupuesto de la familia. Es una enfermedad devastadora.

Los síntomas del lupus varían de una persona a otra. Algunas personas presentan pocos síntomas, otras, en cambio, presentan muchos más. Además, dado que la enfermedad puede afectar diferentes órganos del cuerpo, los síntomas pueden ser diferentes entre uno y otro paciente.

Síntomas

Fatiga constante

Pérdida de peso

Fiebre sin causa aparente (sin infección)

Pérdida de cabello

Enrojecimiento en las mejillas y nariz

Sensibilidad elevada a la exposición al sol y luz ultravioleta

Ulceraciones en la boca o paladar; no son dolorosas

Inflamación en las articulaciones

Presencia de sangre o proteínas en la orina

Crisis convulsivas

Uñas quebradizas

Características del lupus

Erupción facial

Erupción cutánea

Líquido alrededor de los pulmones, corazón u otros órganos

Artritis

Disfunción renal

Bajo nivel de glóbulos blancos

Disfunción de los nervios o del cerebro

Anemia

La Dra. Mireya Rodríguez, quien también atiende a enfermos de lupus en el Hospital La Raza del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señala que una de las manifestaciones cutáneas más características que se presentan en el Lupus Eritematoso son lesiones rojas o hiper-pigmentadas en la nariz y las mejillas, conocidas como “alas de mariposa”. Agrega que existen otros tipos de lupus no tan agresivos como el Eritematoso. Existe el Lupus Discoide que afecta generalmente sólo a la piel. Es quizá el más benigno. Asimismo, hay algo que se denomina lupus light con manifestaciones muy parecidas al lupus, pero que son causados como efectos secundarios de algunos medicamentos.

Para concluir, la Dra. Rodríguez puntualiza que no hay que alarmarse a pesar de que el lupus aún no tiene cura. No obstante, aconseja que asistir a un especialista ayuda en gran medida a controlar las crisis y a tener una calidad de vida que nos permita continuar adelante en todos los sentidos.

(1) Cuadernos ¿Qué es el Lupus Eritematoso Sistémico?, Colegio Mexicano de Reumatología.

(2) Ibidem

Imágenes de http://algunacosamas.blogspot.com