miércoles, 20 de octubre de 2010

Osteoporosis: mujeres las más propensas

¿Cómo te imaginas en tu vejez? ¿te ves chiquita y jorobadita temiendo que alguna caída te ocasione una fractura? El estado de salud que tengamos al envejecer dependerá de los hábitos que mantengamos a lo largo de nuestra vida. Y es que ahora, con la inusitada cantidad de enfermedades a las que estamos expuestas, más vale prevenir a tiempo. Es el caso de la osteoporosis, un padecimiento silencioso que no sabes que lo tienes hasta que te rompes un hueso.

La osteoporosis es la quinta enfermedad de mayor incidencia a nivel mundial, igualando, incluso, a padecimientos cardiovasculares, diabetes, hipertensión y accidentes, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

En México, afecta al 16% de la población mayor de 35 años de edad y, en el mundo, a una de cada tres mujeres y a uno de cada ocho hombres de más de 50 años (1). Para una persona que padece osteoporosis, el costo de su tratamiento y atención médica le significará desembolsar más de 20 mil pesos anuales, sólo en medicamentos y estudios, sin contar con la rehabilitación posterior (2).

La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por el debilitamiento del esqueleto debido a que la densidad y calidad del hueso se reduce, por lo que existe mayor riesgo de fractura, particularmente de la columna vertebral, cadera y muñeca. Afecta sobre todo a las mujeres mayores de 50 años, en plena etapa de la menopausia.

Los minerales como el calcio y el fósforo dan solidez y densidad a nuestros huesos. El organismo requiere un suministro adecuado de éstos para mantener su densidad. También necesita un aporte adecuado de vitamina D para absorber el calcio de los alimentos e incorporarlo a los huesos. Éstos, aumentan su densidad hasta que cumplimos 30 años de edad. A partir de ese momento, la densidad disminuye lentamente. Sin embargo, cuando nuestro organismo no es capaz de regular el contenido mineral de los huesos, éstos pierden densidad y se vuelven débiles y quebradizos, provocando osteoporosis (3).

La osteoporosis no produce síntomas en un primer momento debido a la lenta disminución de la densidad ósea, especialmente entre las personas afectadas por la osteoporosis senil. Cuando empiezas a tener los primeros síntomas, puedes presentar dolor, e incluso, algunas deformaciones cuando la reducción de la masa ósea es tan grande que los huesos se aplastan o se fracturan. 
El dolor crónico de espalda aparece por el aplastamiento de las vértebras que pueden romperse de forma espontánea o como consecuencia de un pequeño golpe. Por lo general, el dolor comienza de manera súbita, se localiza en una zona determinada de la espalda y empeora al estar de pie o al caminar. Puede aparecer dolor al tacto y, habitualmente, el dolor desaparece de forma gradual al cabo de unas semanas o meses. Si se fracturan varias vértebras, puede producirse una curvatura anormal de la columna vertebral (joroba), causando distensión muscular y dolor.

Se pueden fracturar otros huesos con frecuencia a causa de una sobrecarga leve o de una caída. La fractura de cadera es una de las más graves y una de las causas principales de invalidez y pérdida de autonomía en personas de edad avanzada. También es frecuente la fractura de uno de los huesos del brazo (el radio) o en el punto de articulación con la muñeca (fractura de Colles) (4).

La osteoporosis se puede diagnosticar antes de que se produzca una fractura mediante pruebas que miden la densidad de los huesos. La más recomendada por los especialistas es la densitometría ósea, examen que no es doloroso ni presenta ningún riesgo y que te dará la certeza de cómo se encuentran tus huesos.

Entre los factores de riesgo para desarrollar esta enfermedad se encuentran:

-Poca exposición a los rayos solares
-Vida sedentaria
- Escaso consumo de calcio
- Factores genéticos (son más propensas las personas de origen asiático y caucásico)
- Falta de vitamina D
-Fumar, exceso de alcohol, consumo de cafeína y algunos medicamentos   
-Estancias prolongadas en cama 
-Etapa de la menopausia en la mujer
-Constitución delgada
-Edad avanzada

Más vale prevenir que lamentar. Es importante que vayamos adquiriendo hábitos saludables que nos ayuden a mantenernos en buen estado de salud y disminuir el riesgo de padecer enfermedades como la osteoporosis. Consumir alimentos ricos en calcio es un buen inicio. Una dieta balanceada y nutritiva dará a nuestro organismo las defensas que necesita para disminuir el riesgo de enfermarnos. Somos responsables de nuestra salud. Hagámonos cargo de nosotras mismas. En tus manos está tu bienestar.


  
(1) Secretaría de Salud del Gobierno Federal. Programa de Acción del Adulto Mayor 2001-2006.
(2) Entrevista Dr. José Luis Sánchez Mejía, Presidente de la Asociación Médica del Hospital de Traumatología y Ortopedia Lomas Verdes.
(3) Merck SHarp & Dohme de México. 2006 http://www.msd.com.mx/msdmexico/patients/osteoporosis/tecorre.html
(4) Íbidem


Altos costos
Se ocupan más camas por día en hospitales privados o públicos por osteoporosis que por infarto de miocárdico o cáncer de mama; sólo es rebasado por el enfisema pulmonar. El accidente vascular cerebral ocupa menos días-cama en hospital que lo que ocupa un paciente osteoporótico?


Toma nota…
 En todas las clínicas y hospitales del país, encontrarás médicos capacitados para atender el problema de osteoporosis. Ellos te indicarán si necesitas hacerte el estudio de densitometría.

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